lunes, 18 de abril de 2016

Reseña: I Hate Fairyland


Los cuentos de hadas son maravillosos. Historias llenas de colorido, mágicos mundos medievales con cielos habitados por nubes de algodón de azúcar y casitas de paja con adorables lugareños deseosos de repartir felicidad y chuches a todo niño fantasioso que llega a sus dominios acompañado del poder de la amistad y la imaginación. Quien más quien menos ha querido alguna vez, en nuestra más tierna e inocente infancia, poder hacer un viaje por ese o aquel reino encantado. Ese es el caso de Gertrude, más o menos.

Porque Gertrude es una gran hija de perra que ha venido para quedarse y llenar el reino mágico de tripas de unicornio llenas de purpurina y hacerse un collar con los dientes del fauno que acaba de masacrar. A reventar a golpe de arma blanca todos los tropos maravillásticos que llenaban nuestros cuentos infantile. Bienvenidos a Fairyland.


I Hate Fairlyland es una de las series más recientes de Image Comics. Hasta ahora sólo tiene un volumen publicado, Madly Ever After, y para este verano se espera el capítulo inicial del segundo. ¿Que por qué hago la reseña de un cómic que sólo lleva publicados cinco números en lugar de esperarme a que se acabe la serie? Pues porque el primer tomo es autoconclusivo y por el parón de meses que han dado tras acabar ese primer volumen. Ya dentro de un lustro haré una nueva reseña sobre cómo ha ido la serie, ahora vayamos al grano.

La realidad sobra las lluvias de estrellas

Esta es la historia de Gertrude, una niña que un día como cualquier otro desea viajar a un reino mágico de princesas... y su deseo le es concecido. Acaba en Fairyland, donde la reina Cloudia le asigna a su Pepito Grillo particular, le da un mapa y una pista que debe seguir para conseguir la llave mágica que le permitirá volver a casa. En ese camino conocerá mundos de ensueño salidos del imaginario colectivo de los cuentos infantiles y podrá cumplir el sueño de toda niña. Desde ese momento han pasado ya unos cuantos años, en concreto veintisiete. Veintisiete jodidos años con el mismo aspecto de cría de rizos verdes, con el mismo pequeñajo volador encima de tu hombro y con el mismo sentido de la orientación de mierda.

Así que, como dice el refrán: para lo que queda de convento... Ya sabéis como sigue. Ahora este niña mayor se dedica a recorrer las diversas tierras de ensueño buscando con suma ansia la llave que le permita escapar del las tierras que se han convertido en su laberinto infernal de color rosa y olor azucarado. Por supuesto, sin ninguna clase de reparos y con toda la mala hostia que cabe en su cuerpecito. Fue ella quien dejó a la luna llena, narradora celeste del reino, en cuarto menguante perpetuo de un cañonazo en un arranque de ira. Esa es sólo una de las barbaridades que la han convertido en una amenaza para el reino y el objetivo de las triquiñuelas y mercenarios de la reina Cloudia. A partir de aquí la historia sigue, pero dado que son sólo cinco números no quiero seguir spoileando la historia.


Como ya habéis visto, el cómic es una macarrada increíble, una suerte de Rasca y Pica en los mundos de cuentos de hadas llena de humor gamberro y un dibujo tremendamente cuqui y cartoon que contrasta mucho con la historia que está contando. Todo ello obra de Scottie Young, a quien ya vimos hace poco en Rocket Raccoon & Groot así como en la serie en solitario del mapache. Los diseños son caricaturescos, la paleta de colores es muy variada según los escenarios y tiene un par de momentos donde provoca carcajadas sin decir palabra.

Conclusión: Si queréis pasar un rato ameno y leer una historia rápida de humor gamberro y mucha sangre salpicando ya estáis tardando en repasar las desventuras de Gertrude. Nada de profundas reflexiones sobre la violencia humana ni una deconstrucción de los personajes de cuentos clásicos: aquí se viene a pasarlo bien y echarse unas risas.


4 comentarios:

  1. Habrá que echarle un ojo, si los babys marvel se me hacen simpáticos, esto que suena más original me llama la atención. Saludos afectuosos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Este cómic tiene una mezcla entre simpatía, ternura, gore y risas que merece la pena un vistazo.

      Eliminar
  2. Es un cómic que me ha llamado bastante la atención, por su original propuesta. No sabía que era del mismo dibujante que el de la serie en solitario de Rocket Racoon, que me pareció que poseía un estilo bastante interesante y frenético. Supongo que le daré una oportunidad dentro de poco, especialmente si consideramos que no posee una gran cantidad de números.

    Saludos!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. No sólo el estilo es frenético sino que el ritmo de lectura también lo es. Lo recomiendo como lectura para descansar después de leer otras cosas más densas.

      Eliminar